La hormiga argentina es de color marrón oscuro, miden entre 2 y 3 mm y las reinas hasta 6mm.
Construyen sus nidos en tierras húmedas cerca de edificaciones, plantas, maderas o agua.
Sus hormigueros son sociedades poligínicas, en un mismo hormiguero pueden convivir varias reinas fértiles, ello hace posible que se multipliquen mucho más rápidamente, teniendo sus colonias un crecimiento muy elevado.
Son especialmente agresivas, realizando batallas por el control del territorio, abarcando además grandes extensiones.
¿De qué se alimentan?
Prefieren alimentarse con comida dulce, jugos de frutas y plantas.
Las obreras tienden a seguir rutas regulares cuando buscan su alimento, ayudándose de sus feromonas van dejando senderos cuando encuentran algún manjar, para que sus compañeras puedan seguir su rastro y localizar el camino.
La hormiga argentina, como otras especies de hormigas suelen cuidar insectos productores de miel para beneficiarse de ésta a cambio de sus servicios. No hacen nada gratis.
Sus alimentos preferidos son los ricos en azúcares y jarabes, pero se pueden alimentar con todo tipo de comida incluyendo carne, huevos, grasas, aceites, etc.
Suelen mostrar bastante agresividad y se adaptan rápidamente a las zonas urbanas.
Hábitat
Es originaria de Argentina, Paraguay y Uruguay, aunque actualmente se encuentra distribuida en muchos otros países
Durante el otoño, las colonias del exterior se agrupan para formar enormes nidos hibernantes.
En interiores, esta hormiga normalmente anida cerca de alguna fuente de humedad como las tuberías de agua, fregaderos, macetas, etc, ya que necesitan mucha agua para sobrevivir.
Su hábito de hacer caminos encima de todo incluidos los lugares de desperdicios, drenajes, escupitajos, y en general sitios poco higiénicos, las hacen portadoras de organismos patógenos que hacen que tenerlas cerca no resulte nada recomendable.
Su acción provoca la muerte de las especies nativas de las zonas que invaden, provocando cambios irreversibles en el ecosistema.