Morfología
La hormiga cortadora de hojas es de color marrón oscuro y cuenta con pequeñas espinas en el tórax.
Su tamaño varía entre 2 y 12 mm.
Cortan la hojas y la transportan al hormiguero, para posteriormente, masticarlas colocar junto a los hongos que nacen dentro de su colonia y que sirve de alimento para todas ellas.
Pueden deshojar un arbusto o planta en una sola noche.
Normalmente construyen su hormiguero bajo tierra y pueden excavar hasta más de 3 metros de profundidad.
Donde viven
Pueden vivir en zonas boscosas y con gran follaje, aunque las colonias las podemos encontrar con mayor facilidad en plantaciones, granjas, en las zonas más jóvenes de un bosque o incluso en la selva.
En pocos tiempo, sus nidos subterráneos pueden crecer a grandes escalas, con pequeños montículos que se extienden rápidamente a su alrededor, albergando millones de hormigas.
¿Cómo son las colonias de hormigas cortadoras de hojas?
Las cámaras del hormiguero se pueden dividir en dos tipos:
- Las de desperdicios con un tamaño considerable, se encuentran en el perímetro del nido y se usan para almacenar las hormigas muertas y los deshechos de los hongos usados.
- Y las cámaras donde se encuentran los cultivos de hongos que es la estancia que alberga el alimento a la colonia y guarda a las larvas y las pupas.
¿Por qué suponen una amenaza?
Se considera a la hormiga cortadora de hojas una de las principales plagas por los graves daños que provocan en los ecosistemas.
Son capaces de dejar peladas ramas en poco tiempo, así que pueden devorar rápidamente la flora.
Pueden dañar cultivos, pastizales, malezas, árboles de gran importancia ecológica y forestal e incluso especies de jardín.
Las plantas como la yuca, el cacao, el maíz, la fresa, el mango, la caña de azúcar y el eucalipto, entre otras, son las que más les gustan.