Partes de una hormiga

Las hormigas son insectos invertebrados cuyo tamaño varia dependiendo de la especie a la que pertenezcan y a su rol dentro de la colonia, ya que la reina es de 3 a 4 veces más grande que el resto. Ahora vamos a conocer en detalle las partes de una hormiga.

Su cuerpo se compone de la cabeza y de dos secciones, la primera sección corresponde a las patas y el tórax, y la otra sección refiere al estómago o abdomen.

Cabeza

Está compuesta por una mandíbula muy fuerte, por dos ojos y dos antenas. Las antenas son las utilizadas para comunicarse entre ellas. La cabeza de la hormiga también tiene algunos pelos sensibles que le ayudan a identificar diferentes olores y sabores.

Partes que componen la cabeza

Ojos

Las hormigas tienen ojos compuestos que las dotan de una visión panorámica del mundo que las rodea, aunque no les permiten ver en gran resolución. Su tamaño varía según su especie.

Se componen de diversos lentes de muy pequeño tamaño que se unen entre sí. Sus ojos son muy útiles para la detección aguda de los movimientos, algunas hormigas tienen tres manchas pequeñas en sus cabezas que funcionan como ojos extras, estas manchas se llaman ocelos y detectan perfectamente la luz.

Antenas

Son los órganos sensoriales de la hormiga y se ubican en su cabeza. Las antenas son utilizadas para detectar sustancias químicas como feromonas, alimentos y otros estímulos y pueden transmitir y recibir señales por medio del tacto.

Mandíbulas

Son las herramientas más importantes de la hormiga. Las hormigas utilizan sus mandíbulas para defenderse, manipular objetos, transportar alimentos, para cortar y digerir alimentos y para construir nidos y cámaras.

Se muestran como grandes protuberancias que se arquean a partir de la boca, y las utilizan como manos para agarrar o morder.

Alas

Solamente las poseen las hormigas reinas y los zánganos, que son las únicas hormigas que pueden reproducirse y las utilizan con fines de apareamiento, despliegan sus alas en primavera o en otoño, y se aparean un solo día en sus vidas, el macho o zángano, perderá la vida horas después, y la reina fecundada y lista para organizar su hormiguero se las arrancará y posteriormente se las comerá ya que contienen una gran cantidad de nutrientes, muy útiles mientras está en período de gestación.

Abdomen

Es la parte inferior y más grande del cuerpo de la hormiga. En el abdomen se encuentra el sistema digestivo, los órganos reproductores, los músculos de las patas y las glándulas productoras de feromonas.

Esta parte del cuerpo se encarga de proteger los órganos internos de este insecto, como son los órganos del aparato respiratorio, del aparato reproductivo, y del sistema excretor. También se le conoce con el nombre de metasoma.

Mesosoma

El mesosoma es la parte más grande y contiene el tórax de la hormiga. En su interior se encuentran los órganos principales del sistema nervioso, respiratorio, circulatorio y muscular de la hormiga.

Es la parte superior del cuerpo, es una parte delgada y muscular que tiene como objetivo fortalecer las patas, se une a la parte baja del cuerpo de la hormiga y le permite enderezarse y doblarse con gran facilidad.

El mesosoma de la hormiga es muy importante para su movilidad y capacidad de defensa. Aquí se encuentran las patas y las alas, así como las glándulas venenosas y los aguijones. También tiene una importante función en la transportación de alimento y en la comunicación dentro de la colonia de hormigas.

Patas

Son las extremidades locomotoras de la hormiga. Están dotadas de pelos que les permiten detectar estímulos táctiles y químicos, además de contar con garras que les dan un mayor agarre en la superficie. Con estas las hormigas pueden sentir todo lo que le rodea. En cada terminación tiene una garra enganchada que le permite subir y colgarse de diversas superficies.

Tórax

El tórax de la hormiga se encuentra en la parte central de su cuerpo y está compuesto por tres segmentos: el protórax, el mesotórax y el metatórax. Cada uno de estos segmentos tiene un par de patas articuladas que le permiten caminar y correr con gran agilidad.

El tórax de la hormiga está cubierto por una exoesqueleto duro y resistente que le brinda protección y soporte estructural. La forma y tamaño del tórax varían según la especie de hormiga, pero en general es bastante compacto y robusto para permitirle moverse rápidamente en diferentes terrenos y superficies.

Es la parte central del cuerpo de la hormiga y cuenta con tres pares de patas, así como con dos pares de alas en algunas especies. En el tórax se encuentra el corazón y los órganos respiratorios.

Compuesto por seis patas que le permite agarrarse y escalar en diversas superficies.